En Extremeña de Pistachos somos conscientes de las dificultades que existirán en los próximos años para absorber la producción de pistacho prevista al no haber suficiente capacidad de procesado en España para cubrir el crecimiento del cultivo. En pocos años, se estima entren en producción de manera simultánea la mayoría de la superficie plantada en el último lustro y debemos estar preparados para ello.
En la actualidad, las procesadoras privadas, en una situación clara de superioridad, compran el pistacho a precios por debajo de mercado conscientes de la falta de competencia real. Desde Extremeña de Pistachos consideramos que, con la escasa capacidad de procesado actual que existe en nuestra región y el crecimiento exponencial futuro de la producción en los próximos años, corremos serio riesgo de que unas pocas empresas privadas acaben monopolizando el sector. Desde Extremeña de Pistachos estamos decididos a dar la vuelta a esta situación.